Hasta el 14 de noviembre, la Policía Local de Fuenlabrada lleva a cabo una campaña de control del transporte escolar en el ámbito urbano, integrada dentro de las operaciones especiales de la Dirección General de Tráfico (DGT).
El objetivo de esta iniciativa es garantizar la seguridad vial de los vehículos que realizan rutas escolares urbanas e interurbanas, verificando tanto su estado técnico como las condiciones de los conductores y conductoras.
Agentes de la unidad de Seguridad Vial están inspeccionando los vehículos para comprobar la idoneidad de los cinturones de seguridad, los sistemas de evacuación en caso de emergencia y otras medidas de seguridad obligatorias.
Asimismo, se revisa que las personas al volante dispongan de los permisos de conducir y trabajo requeridos según la normativa vigente sobre transporte escolar y de menores. Los agentes también realizan pruebas de alcoholemia y detección de drogas para garantizar que los conductores desarrollan su labor en óptimas condiciones psicofísicas.
Además, los vehículos son sometidos a una revisión exhaustiva para asegurar que cumplen con las condiciones técnicas establecidas por la ley.
“Con esta iniciativa queremos incidir en la importancia del buen estado de los autocares y de las personas que los conducen en una actividad tan delicada como es el transporte de menores. El objetivo es garantizar la seguridad vial de los niños y niñas en sus trayectos al cole”, explicó la concejala responsable de Seguridad Ciudadana, Raquel López.
La Concejalía de Seguridad Ciudadana, a través de la Policía Local de Fuenlabrada, se suma así a esta campaña nacional con la intención de reforzar la seguridad en todos los aspectos del transporte escolar, especialmente en los autobuses contratados para los desplazamientos diarios.



