El arquero belga, Thibaut Courtois, se dejó ver en el XI Torneo Solidario del ACD Miraflor, celebrado en el Campo Municipal de El Arroyo en Fuenlabrada, en una reaparición sorprendente después de su lesión. ¿El motivo? Acompañar a su hijo Nicolás, quien juega en el Prebenjamín B del Real Madrid, en sus primeros pasos como futbolista.
A pesar de estar en muletas y aún recuperándose de una operación de menisco, Courtois no dudó en estar presente para respaldar a su pequeño en este emocionante torneo. Su presencia causó sensación entre los presentes, quienes destacaron su amabilidad al interactuar con los aficionados y tomarse fotos con ellos.
Aun así, Courtois no olvida su lesión y se le vio cuidando su rodilla, incluso aplicando hielo en ocasiones. Su reciente operación lo mantendrá alejado de las canchas durante seis a ocho semanas, pero su determinación y buen ánimo son evidentes mientras se prepara para su rehabilitación.
Aunque la lesión haya sido un revés, tanto Courtois como el vestuario del Real Madrid han recuperado la sonrisa. El portero mostró su felicidad al acompañar a su hijo en el torneo, demostrando su mejor predisposición para enfrentar este nuevo desafío de recuperación con optimismo y determinación.
